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"Ya es fiable". Con estas palabras, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha retratado la actual situación de nuestro país a la vez que ha valorado el acto "valiente y responsable" del Gobierno con la aprobación de los Presupuestos para 2012, que recogen un recorte de 27.300 millones de euros, y que, a su juicio, apuestan por mantener los servicios sociales.

"España será más fiable a finales de este año, cuando cumpla con el objetivo de déficit público del 5,3% y se pongan las bases para la recuperación", ha añadido de manera rotunda Cospedal durante su intervención en la reunión entre varios miembros del PP para analizar las cuentas aprobadas en el Consejo de Ministros de este viernes.

Según la secretaria general de los 'populares', España tiene hoy en día "credibilidad", como demuestran la últimas subastas de deuda pública en las que se han reducido los costes de las emisiones. Asimismo, se ha congratulado que desde varios socios europeos se aplaudan estas medidas.

Además, Cospedal ha aprovechado la ocasión para recordar que los objetivos de déficit público también se los exigía Bruselas al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, por lo que ha reprobado que no haya sido hasta el cambio de color en La Moncloa cuando el déficit se ha convertido en un "compromiso auténtico".

"El Gobierno ahora tiene que hacer lo que no se hizo durante tanto tiempo", ha lamentado, para después enfatizar que los Presupuestos para 2012 inspiran "confianza y credibilidad".

Para la dirigente 'popular', las medidas contempladas son "coherentes" para cumplir con el "inexcusable" objetivo de déficit. "Este es el camino recto, es un camino difícil, pero es el camino recto para ayudar a la recuperación", ha indicado.

En este sentido, ha recordado que la eliminación de deducciones fiscales al Impuesto de Sociedades y la subida del tabaco son decisiones "extraordinarias y de carácter temporal". "Son medidas duras, pero temporales", ha justificado.

Asimismo, ha puesto en valor que las cuentas para este año mantienen los servicios públicos "esenciales". "Hay compromisos básicos que se mantienen, lo que es un signo muy significativo de la apuesta de mantener los servicios sociales", ha aseverado.

PRIORIDAD PARA LO IMPORTANTE
Quien también ha entrado a valorar la aprobación de los Presupuestos ha sido la ministra de Fomento, Ana Pastor, quien ha defendido que sean "austeros" y ha afirmado que "priorizan lo importante".

En concreto, Pastor ha identificado como "una cosa muy importante no tocar el IVA" en los presupuestos que es "lo que afecta a la vida", o "preservar" las pensiones, las prestaciones por desempleo o el sueldo de los funcionarios, que "otros países no lo han hecho".

En esta línea, ha defendido que "en el mayor esfuerzo de consolidación de la democracia" en unos presupuestos también se han "preservado" la educación y la sanidad.

Todo ello, tras dejar claro que "el problema que tiene España en este momento" es consecuencia, a su parecer, de un Gobierno socialista que "gastó más de lo que ingresó", y que ha cifrado en un desfase de 90.000 millones en el ejercicio de 2011.

De hecho, ha remarcado que los actuales presupuestos son "austeros y realistas" porque "el PSOE dijo que el déficit era de un 6% y ahora es resulta que es del 8,5", pero ha hecho hincapié en que el Gobierno de Mariano Rajoy "ha hecho un esfuerzo importantísimo para lograr cumplir ese objetivo del déficit del 5,3%". "Y lo vamos a conseguir", ha apostillado.

"MÁS DESIGUALDAD Y DESEMPLEO"
Sin embargo, no todos comparten el entusiasmo generado en el seno popular tras la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para este año. Así, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha acusado a la derecha de utilizar la crisis económica como "coartada" para destruir el estado del bienestar, adoptando medidas como la reforma laboral o los Presupuestos Generales del Estado que conllevan "más desigualdad y desempleo".

Rubalcaba, que ha participado este sábado en el acto de inauguración del 15º Congreso Regional del PSOE Aragón, ha asegurado que con estas medidas tomadas el PP ya ha comenzado a perder "credibilidad", como demuestran, en su opinión, los resultados de las elecciones en Andalucía y Asturias.

El dirigente socialista ha observado que ahora, tras presentar los PGE, "ya sabemos por qué los escondían", porque incluían una amnistía fiscal, "un proyecto que consiste en cobrar más a los trabajadores y quitar impuestos a los defraudadores", por lo que son, a su juicio, "unos presupuestos inaceptables, que proponen subir la luz, el gas, los impuestos, recortar en educación, en dependencia, en investigación, en inversiones sociales, en partidas para crear empleo" y recortando "mucho los impuestos a quienes defraudan a Hacienda".

Por tanto, los presupuestos sólo plantean "menos crecimiento, más paro y más desigualdad. No harán crecer la economía ni el empleo ni mejorarán la igualdad, por eso nos opondremos a los presupuestos", ha aseverado, al apreciar que "siguen caminando en la dirección de la reforma laboral". El Gobierno "persevera en ese error", ha lamentado.

Muy crítico se ha mostrado también el coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, quien ha manifestado que los Presupuestos del Gobierno de Mariano Rajoy son "los Presupuestos del sufrimiento y el paro para la mayoría y de los regalos fiscales para una minoría".

Lara ha hecho de esta manera su primera valoración después de que se conocieran los cuentas durante su intervención ante el Consejo Político Federal de la coalición y ha lamentado que los presupuestos "afectan al gasto social de una manera brutal": a la ley de dependencia, a la vivienda, a la educación, a la integración de los inmigrantes y a la cooperación internacional, ha enumerado.

Igualmente, el líder de IU ha valorado de forma especialmente negativa el recorte en el Ministerio de Fomento (34%), porque "significa que no hay inversión pública, que hay más desempleo y que hay recesión".

Sobre la amnistía fiscal para "los defraudadores de cuello blanco", ha denunciado que "se castiga a los ciudadanos que pagan sus impuestos cuando se descuidan y se premia a los que defraudan grandes fortunas". También a este respecto, ha señalado que "las rentas del trabajo siguen abasteciendo las arcas de la Hacienda Pública de una manera absoluta".